Los síntomas de la demencia vascular varían dependiendo de que parte del cerebro está afectada y de la causa de la demencia vascular. Un síntoma temprano común es un declive en la habilidad de organizar los pensamientos o las acciones. A menudo el síntoma más evidente de la demencia vascular es tener problemas con la memoria. Otros síntomas incluyen los siguientes:
Gente con la demencia vascular puede tener otras señales (físicas) de un derrame o un mini-derrame. Puede que un área localizada del cuerpo, por ejemplo una mano o los músculos de la cara, sea debilitado o también es posible que la persona tenga un área entumecido en el cuerpo.
Los síntomas de la demencia vascular pueden tener un comienzo repentino si son relacionados con un derrame cerebral o un mini-derrame. Gente con este tipo de demencia vascular, a veces llamada demencia de infartos múltiples, tiene una progresión de los síntomas que ocurre en pasos. Esto significa que los síntomas siguen iguales por un tiempo, y de repente empeoran cuando el individuo sufre derrames adicionales.
Gente con otras formas de la demencia vascular tendrá un aumento gradual de los síntomas y la enfermedad gradualmente empeorará al pasar el tiempo. Esto es semejante a la progresión de la enfermedad de Alzheimer.